Ubicado en Chacras de Coria, el espacio liderado por los doctores Jimena Miranda y Mariano Palmili se orienta al bienestar de las mujeres. Un equipo médico interdisciplinario y tecnología de vanguardia, entre las claves del proyecto.
A la doctora clínica Jimena Miranda y al traumatólogo Mariano Palmili los une mucho más que la pasión por la medicina. Están casados desde hace años, tienen 4 hijos y comparten el espíritu emprendedor.
Ambos desarrollan sus especialidades en centros médicos de la provincia y en 2021 concretaron su primer emprendimiento juntos dentro del rubro gráfico. Hoy vuelven a apostar por un proyecto propio, esta vez, orientado al bienestar de las mujeres. “Calma es un centro de ginecología y estética que funciona dentro del instituto Belona. Está ubicado en la calle Loria de Chacras de Coria, en una casona totalmente acondicionada y rodeada por un jardín maravilloso. La propuesta de abrirlo llegó por parte de su directora médica, Eugenia Genest, con quien me une una gran amistad”, cuenta Jimena Miranda.
“Nos pareció interesante la idea de crear un espacio de salud integral, que no solo se enfocara en la parte estética, sino también en la ginecológica, que muchas veces no se trata por desconocimiento o tabú.
El concepto de ‘calma’ hace referencia a apaciguar dolencias o malestares, a encontrar el bienestar y este lugar, pensado desde su origen para mujeres, contribuye a este propósito”, agrega.
Un servicio único
Bajo la dirección de los doctores Palmili-Miranda, el equipo médico de Calma está integrado por una ginecóloga y 5 dermatólogas.
“Además de los servicios tradicionales de los centros de estética (faciales y corporales), abordamos diversas problemáticas que afectan a mujeres de todas las edades. Entre ellas, incontinencia urinaria, síntomas vinculados al embarazo, puerperio y menopausia, así como atrofias vaginales.
Contamos con tecnología de última generación. Recientemente adquirimos un equipo láser Femilift, único en Mendoza, que permite realizar tratamientos no quirúrgicos con excelentes resultados y pronto nos llegará otro para completar los tratamientos que ofrecemos. La inversión inicial del proyecto rondó los 40.000 dólares”, señala Jimena.
En cuanto a las expectativas, destaca: “Estamos muy entusiasmados con el proyecto. Nos capacitamos con especialistas de Buenos Aires para el uso de los equipos, abrimos a fines de julio y la respuesta ha sido muy buena entre las pacientes.
En cuanto a la comunidad médica, ofrecemos una verdadera propuesta de valor, tanto desde lo profesional como desde lo económico, para los profesionales que nos acompañan.
Nos anima trabajar juntos, ofrecer un servicio diferencial y contribuir al bienestar integral de las mujeres”.